La economía andaluza creció un 0,1 % en el segundo trimestre de 2011 respecto al mismo período de 2010, según los datos de la contabilidad regional que elabora el Instituto de Estadística de Andalucía (IEA). Estas cifras suponen un frenazo respecto al trimestre anterior, cuando el Producto Interior Bruto (PIB) aumentó un 0,3%.
La desaceleración se debe sobre todo a la bajada del 6,1% de la formación bruta de capital -la inversión de las empresas-. También se explica por la caída del consumo tanto de los hogares (-0,5%) como el de las administraciones públicas (-0,8%).
Las exportaciones fueron el único componente del PIB que aumentó en el segundo trimestre respecto al mismo período de 2010, concretamente un 7%. Las importaciones de bienes y servicios también crecieron, aunque muy levemente, apenas un 0,3%.
Por sectores, las ramas energéticas experimentaron un fuerte aumento de la actividad, del 9,1 %, lo que equivale a una contribución positiva de dos décimas al PIB, aunque el valor añadido bruto de las ramas industriales cayó un 4,2%.
También registraron una evolución positiva la agricultura, la pesca y la ganadería, que crecieron entre abril y junio un 2%. El sector de la construcción, pese a mejorar respecto al trimestre anterior, cayó un 4,3% frente al segundo trimestre de 2010. Por su parte, los servicios tuvieron un crecimiento del 0,9%.
El empleo, medido tanto en puestos de trabajo (-2%) como en la remuneración de los asalariados (-0,7%), sigue deteriorándose.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 15 de septiembre de 2011