En marzo de 2010 el Santander inició una guerra de depósitos con ofertas al 4% para quien trajera dinero de otras entidades. Ayer, 16 meses después, con el mercado de financiación todavía cerrado, inició el segundo capítulo: una emisión de pagarés de entre 5.000 y 7.500 millones, a un tipo de interés de entre el 3% y el 3,75%, según el folleto registrado. Esta emisión de pagarés cuenta con un plazo de vencimiento mínimo de 3 días hábiles y uno máximo de 25 meses, cotizará en el mercado secundario como las Letras del Tesoro y se dirige a inversores minoristas e institucionales.
Los pagarés, que se venderán en sus oficinas y en las de Banif, tienen un importe mínimo de 30.000 euros y un máximo de 100.000. Esta segunda guerra, de caza mayor por el volumen de dinero, volverá a presionar a los más débiles, que elevarán su remuneración para evitar fugas de clientes y se quedarán sin ingresos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 17 de septiembre de 2011