La familia de Bernardo Bilbao, minusválido de 80 años, ha ganado la batalla en los tribunales al Ayuntamiento de Lezama. Un reciente auto del juzgado de lo Contencioso número 5 de Bilbao ha ordenado al consistorio vizcaíno eliminar, o adaptar en su defecto, todas las barreras arquitectónicas que en forma de badenes y bandas reductoras de la velocidad impiden la movilidad del anciano, en silla de ruedas, por el barrio en el que reside, a un kilómetro del núcleo urbano.
Fechado anteayer y recurrible en apelación, el fallo da tres meses de plazo para ejecutar las obras y desestima, por el contrario, la exigencia municipal de que el demandante presentara una póliza de responsabilidad civil por los atropellos que la retirada de barreras al tráfico rodado podría provocar. Los allegados de Bilbao decidieron recurrir a la justicia al entender que la colocación de bandas y badenes, con el pretexto de una supuesta reivindicación vecinal de seguridad, respondía más bien a una "venganza", dado que la familia había mantenido ya un litigio previo con el Ayuntamiento.
Bilbao, que cuenta con el apoyo de distintas asociaciones y cuyo caso se ha tratado incluso en el Parlamento, mantiene otra causa abierta en el juzgado por la que demanda la concesión municipal de licencia para edificar una vivienda adaptada.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 17 de septiembre de 2011