Las obras del metro de Granada han sufrido una ralentización en los últimos meses después de que las empresas constructoras no hayan cobrado nada de los trabajos facturados en 2011. La Junta, consciente de esta falta de financiación, hace tiempo que dejó de exigirles que siguieran a buen ritmo. Desde junio las empresas mantienen a muy pocos operarios en los tajos y el ritmo es tan bajo que apenas se ve avance. La Asociación de Constructores y Promotores de Granada cifra en 44 millones lo que la Administración les adeuda y dice que están asfixiadas. La infraestructura está al 50% de ejecución en cantidad invertida, según Obras Públicas, que espera abonar toda la deuda antes de final de año.
En Sevilla, tras la apertura de la línea 1 del metro, en abril de 2009, comenzaron de inmediato los proyectos para las líneas 2, 3 y 4, que este año deberían estar en obras, según las previsiones iniciales. Sin embargo solo han pasado por la fase de alegaciones y las primeras licitaciones no están previstas hasta el próximo año. Son 41,7 kilómetros presupuestados en 2.843 millones que deberían funcionar en 2017. En la actualidad, estas líneas siguen en fase de discusión política.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 18 de septiembre de 2011