Cuando los más ricos del mundo comprenden que sus futuros no valen nada si se desvaloriza la economía y se generaliza la revuelta social inducida por la ideología neoliberal, ¿por qué el PP deslegitima el Movimiento del 15-M, acusándole de antisistema y de ser manipulado por la izquierda? Campaña que desciende a los Ayuntamientos como Elche o Guadalix, obstaculizando el derecho de manifestación y reunión. ¿Se equivocan Aguirre y el fiscal descalificando al 15-M o se vendan antes de la herida del 20-N? Siguen su estrategia de lanzar la primera mentira, la de impacto, aunque luego se desdigan, creando el ambiente que interesa. Nadie cree que la democracia directa de los indignados "puede esconder un golpe de Estado", pero lo dice Aguirre, públicamente rebelde por el IVA aprobado en el Parlamento, que utiliza los fondos públicos para entregar al negocio privado la sanidad y la enseñanza públicas, golpe de Estado silencioso. Más que el 15-M, hay partidos y políticos que deslegitiman nuestro sistema representativo. ¿O es que a Aguirre no le leen las encuestas?
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 4 de octubre de 2011