La agencia de calificación Standard & Poor's rebajó ayer la calificación de las deudas de la Comunidad Valenciana desde A- hasta A, el último escalón antes de perder lo que se considera una buena nota. S&P justifica su decisión porque considera que la Generalitat Valenciana ha "retrasado" la puesta en marcha de recortes en la primera mitad del año. S&P cree que el margen de actuación de la Comunidad Valenciana "se ve lastrado por su falta de disposición a incrementar impuestos y por la tardanza en poner en marcha una reducción de costes ambiciosa". Además, defiende que se han sobrestimado ingresos y que el plan de reequilibrio "introduce suposiciones de difícil cumplimiento".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 12 de octubre de 2011