Comparten como territorio profesional la cultura del proyecto. Sandra Figuerola, diseñadora gráfica e industrial, y Zdenka Lara, interiorista y arquitecta, han decidido volcar su experiencia en la coordinación de la Mostra Serie Limitada, un proyecto multidisciplinar que se podrá ver hoy en Las Naves, el centro de diseño situado en la calle de Juan Verdeguer de Valencia. Un barómetro estilístico del diseño con acento femenino. "Es una forma de crear plataformas específicas para las mujeres diseñadoras", especifica Figuerola, "como existen otras plataformas para jóvenes o para diferentes colectivos profesionales". "Una forma de especialización", apostilla Zdenka Lara. "De entrada, el nombre", señala Figuerola, "no contiene el distintivo de género, igual en el futuro se puede abrir a los diseñadores, pero en esta primera fase, nos servía para acotar". "En estos momentos", comenta Lara, "parece que hay más oportunidades para los hombres que para las mujeres, si sumas, la situación de crisis y que la mujer, por razones familiares, muchas veces se ve obligada a realizar un parón o paréntesis profesional, nos parecía fundamental crear esta plataforma especializada de difusión".
La muestra busca un nexo común entre las diseñadoras
"Nos interesa abrir una puerta paralela a la industria"
La mostra reúne el trabajo de 18 diseñadoras y estudios desde una mirada heterogénea. "Están representadas", señala Figuerola, "disciplinas como moda, diseño, mueble, iluminación, complementos, a partir de un filtro, necesario, para mantener unos estándares de calidad". "Por otro lado, algunas de las participantes se encuentran en esa frontera entre diseño y arte -fotografía, escultura- lo que le da a la mostra un carácter muy plástico y creativo", añade Lara. Entre los estudios y diseñadoras figuran Nieves Contreras, Mariví Calvo, Meritxell Durán, María Roig, Sanserif Creatius, etc. "Muchas mujeres", señala Figuerola, "estamos comenzando a funcionar con iniciativas más personales, creando nuestras propias ediciones de objetos". "Se trata de pequeñas series limitadas", continúa Lara, "donde cada una se autoproduce sus piezas". "Y a colocarlos o bien en tiendas especializadas, en mercados o comercializarlos desde los propios talleres o estudios de las diseñadoras", señala Figuerola. "Así es como desde hace tiempo", continúa, "se está funcionando en muchos lugares de Europa. Se ha tenido que echar mano del ingenio para sacar a la luz las producciones". "Nos interesa", señala Lara, "abrir una puerta paralela a la industria y mantenerla abierta".
Esperan que la primera convocatoria tenga continuidad. "Queremos darle carácter periódico, que cada tres meses se repita este tipo de convocatoria y que vaya sumando perfiles de mujeres en su participación". Y buscar un nexo común entre las diseñadoras. "Todas están salpicadas por un cierto sentido del humor, algo con un toque lúdico", dice Figuerola.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 15 de octubre de 2011