La cumbre europea que se celebra hoy y los planes de recapitalización de la banca han centrado el foco de atención económica en la semana. Levantó la voz el presidente del Banco Santander, Emilio Botín. Su mensaje coincidió con los del expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, y el expresidente español Felipe González. Los dos fueron rotundos. Lula tuvo una intervención pública organizada por la Fundación Alternativas, próxima al PSOE, y otra privada organizada en la Fundación Botín, a la que asistió una parte muy importante del PIB español, muchos exministros de la democracia y varios políticos, entre ellos los alcaldes de Madrid y Santander. Lula incidió varios mensajes ("los europeos olvidan que la construcción europea es un patrimonio de la humanidad"; "el G-20 toma decisiones que luego no se cumplen"; "es inexplicable que un país como Grecia, con el 2% del PIB europeo, pueda provocar la crisis que ha generado"; "creían que los mercados iban a resolver los problemas y cuando han fallado no ha habido decisión política"; "pido que España mire más a Latinoamérica"). Y remató con una pregunta: "¿Cómo recuperar la esperanza de la juventud europea?".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 23 de octubre de 2011