La Sociedade Galega de Historia Natural trasladó ayer a sus nuevas instalaciones en Ferrol una de sus piezas más valiosas, un calamar gigante de ocho metros y 90 kilos que fue localizado en 2001 en Barreiros. El cefalópodo se encuentra alojado en una gran urna de cristal, de la que fue necesario vaciar los 300 litros de alcohol de 60 grados en los que se conserva el cadáver del animal. Es una especie habitual en el litoral cantábrico y que, de llegar a adulta, puede alcanzar los 14 metros de longitud.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 25 de octubre de 2011