Cristina Fernández de Kirchner puede llegar a batir más de un récord después de estas elecciones. Repasemos:
- Al superar el 51,7% que obtuvo Raúl Alfonsín, es la presidenta más votada desde que volvió la democracia a Argentina, y es probable que obtenga la mayor diferencia de la historia respecto del segundo candidato más votado.
- Con su segundo mandato, sumado al que le precedió -el de su marido, Néstor Kirchner-, iniciará el periodo más prolongado de una misma fuerza en el poder desde que el voto es universal en nuestro país.
- La avalancha de votos le permitiría retomar, con el acompañamiento de fuerzas aliadas, el control de la Cámara de Diputados y mantener la ajustada mayoría del oficialismo en el Senado. En ambos casos, formaría quórum (tendría la mitad más uno) para iniciar las sesiones sin necesidad de acordar los temarios con legisladores de la oposición.
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La única incógnita que queda por despejar es: ¿Cómo administrará la presidenta, que no puede ser reelecta otra vez -la Constitución impone un máximo de dos mandatos consecutivos-, el poder que le han dado las urnas?
Durante la campaña, un sector de la oposición ha agitado el fantasma de la búsqueda de la perpetuación en el poder de manera indefinida.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 25 de octubre de 2011