El Ayuntamiento de El Ejido (Almería) ha puesto precio al amor y va a cobrar a las parejas que deseen utilizar alguna instalación municipal para oficiar su boda civil. La medida, aprobada ayer por la Corporación municipal en sesión plenaria, se aplicará de manera inminente tras la publicación de la nueva ordenanza en materia tributaria en el Boletín Oficial de la Provincia.
El precio mínimo por boda se ha fijado en 75 euros y el máximo puede alcanzar hasta los 600 euros. En este extremo se sitúa, por ejemplo, una ceremonia que tenga lugar en el Castillo de Guardias Viejas. Las tarifas variarán en función del día de la semana, el lugar de celebración y el boato. "No queremos que una boda le cueste dinero a los ejidenses", justificó el alcalde, Francisco Góngora (PP), regidor dispuesto a sacarle rentabilidad al matrimonio civil, un servicio exento de pago en localidades como Almería o Roquetas de Mar.
El alcalde ejidense, consciente del gasto impuesto, sugirió a las parejas como medida de ahorro que, en lugar de invertir 600 euros en una ceremonia en el Castillo de Guardias Viejas, opten por un enlace "mucho más humilde" en el salón de actos del Ayuntamiento, por el que solo tendrían que abonar 75 euros.
El PSOE, principal partido de la oposición, califica de "despropósito" los "tributos nuevos", más cuando el PP "aseguró que no iba a subir impuestos".
Sin embargo, las medidas asociadas a la recaudación existen. La semana pasada el Ayuntamiento anunció la creación de una patrulla especial de la Policía Local especial que sancionará por el incumplimiento de la ordenanza de la convivencia.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 26 de octubre de 2011