Credit Suisse ha notificado a varios clientes estadounidenses que informará de su identidad a las autoridades fiscales de EE UU, según el diario Financial Times, que no precisa el número de afectados. En 2009 el banco UBS ya aceptó pagar 790 millones de dólares (569 millones de euros) para cerrar una demanda criminal y recibió la recomendación de las autoridades suizas de que proporcionara a la Hacienda estadounidense los datos de 5.000 clientes acusados de evadir impuestos.
Desde entonces las autoridades de EE UU han extendido sus investigaciones a otras entidades suizas mientras el Gobierno helvético ha buscado acuerdos para tratar de proteger a sus bancos, y su tradicional secreto bancario. El tratado fiscal entre ambos países recoge la cooperación entre sus autoridades en determinados casos.
Credit Suisse informó recientemente de que había provisionado 295 millones de francos suizos (236 millones de euros) para hacer frente a cualquier acuerdo con las autoridades de EE UU.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 9 de noviembre de 2011