La Encuesta de condiciones de vida 2011, publicada por el INE, indica que el 21,8% de la población que reside en España está en riesgo de pobreza. Este dato confirma lo que otros estudios, como los de Cáritas Española, vienen demostrando desde hace tiempo.
Y confirma lo que constatamos cada día en nuestras calles, obras sociales, parroquias e instituciones educativas. Esta situación debería estar muy presente en la mente de los ciudadanos al ejercer su derecho al voto en las inminentes elecciones generales del domingo, pues no debemos abandonar a su suerte a los más desfavorecidos de la sociedad.
El Apostolado Social de la Compañía de Jesús en España, apoyado en su experiencia cotidiana de acompañar, servir y defender a la población más vulnerable de nuestra sociedad ha publicado el documento Crisis prolongada, solidaridad reforzada, en el que describe todas estas situaciones y formula diversas propuestas para la próxima legislatura.
Debemos hacer un llamamiento a nuestros dirigentes a combinar la responsabilidad ética, el realismo político y el rigor técnico para conseguir que, pese a esta crisis que nos envuelve, la solidaridad con los más necesitados pueda verse reforzada.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 18 de noviembre de 2011