La prima de riesgo española se asomó ayer a la zona de peligro máximo cuando rozó la insostenible barrera psicológica de los 500 puntos básicos que hacen temer un potencial rescate para los países que lo superan. Solo el salvavidas del Banco Central Europeo (BCE) fue capaz, con la compra masiva de deuda, de frenar la sangría, que también afectaba un día más a Italia y, en menor medida, a Francia o Bélgica. En España, la jornada se había agravado cuando el Tesoro colocó 3.562 millones en obligaciones a 10 años al precio más alto desde 1997, por encima del 7%. El mes pasado, bastó con un 5,5%.
Mientras, en Grecia e Italia los nuevos ajustes sacaron a las calles a decenas de miles de personas. En Atenas hubo incidentes y en Italia los estudiantes se movilizaron en 60 ciudades contra el "Gobierno de los banqueros", en alusión al Ejecutivo de Mario Monti.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 18 de noviembre de 2011