Horas después de la reunión del Órgano de Coordinación Tributaria (OCT), el Departamento de Hacienda y Finanzas guipuzcoano difundió un comunicado redactado exclusivamente en euskera en el que acusaba a las otras dos instituciones forales de "boicotear sistemáticamente" dicho órgano, que reúne a las tres Diputaciones y al Gobierno vasco.
El departamento guipuzcoano, en manos de Bildu, acusa en su nota a Bizkaia y a Álava de haberse negado a dialogar sobre el Impuesto de Patrimonio y otras medidas fiscales para alcanzar un acuerdo. Sostiene, por el contrario, que los representantes de ambas Diputaciones aseguraron en la reunión que "no se moverán" de la propuesta que ya tienen acordada entre ellos.
Para la Diputación guipuzcoana, con esta actitud, tanto Bizkaia, donde gobierna el PNV, como Álava, en manos de los populares, están "arruinando sin compasión" el modelo institucional que "tanto parecen defender". A su juicio, esta "postura inmovilista demuestra que hay que cambiar de modelos". "Han dejado pasar el tiempo, creando dudas aquí y allá", deplora.
Gipuzkoa cree que la validez del Órgano de Coordinación Tributaria se encuentra en ese momento en entredicho, ya que no resulta "realmente influyente" cuando las instituciones que lo conforman están dirigidas por partidos diferentes, como ocurre ahora.
El departamento que encabeza Helena Franco asegura además que ha mostrado disposición para el diálogo, pero el resto de instituciones, hasta hace poco "decían que era demasiado pronto para hablar de reformas fiscales" y visto el resultado de la reunión de ayer, por el contrario, "al parecer es ya demasiado tarde".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 25 de noviembre de 2011