La moda del champán con ostras gana adeptos en la ciudad y la oferta gastronómica más afrodisiaca y seductora crece. Dese un gustazo.
- Abridores campeones. Tarik Take, marroquí de 32 años, puede abrir 40 ostras en dos minutos y 11 segundos. Es uno de los expertos abridores de Madrid. Quien desee contrastarlo puede pasarse por el puesto Daniel Sorlut, que sigue la tradición francesa del padre de esta marca desde 1930, George Sorlut, en el mercado de San Miguel. Allí, armado con una especie de cuchillo patatero, sirve ostras especiales Daniel Sorlut, "de sabor más fino y suave" (a 2,50 o 3 euros la unidad) o Fina de Claire "más saladas" (entre 1,50 y 1,80 euros). Clientela extranjera y española se para a cualquier hora: "No hay que tener hambre, las ostras son un disfrute por sí mismas", dice la joven francesa Noel antes de darle un sorbo al cava.
- Terraza parisiense. En Juan Bravo 25 se han tirado a la piscina de las ostras sacándolas directamente a la calle. Una terraza parisiense en el bulevar permite disfrutar de estos moluscos bivalvos capaces de convertir sus impurezas en perlas, a pesar de tener el cerebro más pequeño que los ojos. Una botella de champán, una docena de ostras y toda la noche por delante: uno de los maridajes más sensuales. Cada jueves, viernes y sábado, desde las 20.00 y hasta las 24.00, uno puede dejarse llevar por las sensaciones del supuestamente afrodisiaco dúo, presentado en dos formatos diferentes: una botella de champán y una docena de ostras, por 60 euros; o bien una copa y una unidad, por 8 euros.
- Con Albariño. El mercado de San Antón ofrece, en el puesto de ostras de la segunda planta, hasta cuatro variedades distintas entre 1,50 y 3 euros la unidad: "Las piden más con Albariño, pero también las servimos con cava (8 euros la copa), por supuesto", dice Fernando Negri, el encargado.
- De madrugada En Ramsés (plaza de la Independencia)las ofrecen hasta las tres de la madrugada.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 26 de noviembre de 2011