Un policía de la Comisaría Especial del Congreso de los Diputados fue trasladado ayer al hospital Gregorio Marañón después de que fuera hallado en dependencias de la Cámara baja con un tiro en la cabeza de su arma reglamentaria. Según informó el Samur, el agente ingresó con pronóstico muy grave en el hospital, donde ayer se debatía entre la vida y la muerte. El policía se encontraba solo en uno de los edificios destinados a los grupos parlamentarios, según fuentes del Congreso. La investigación está abierta, pero todo apunta a un intento de suicidio.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 28 de noviembre de 2011