Final en el juicio por la muerte de Miguel Ángel Salgado Pimentel, el informático asesinado en Ciempozuelos el 14 de marzo de 2007. La acusación particular y el fiscal rebajaron de 39 a 13 años y un día la solicitud de cárcel para Eloy Sánchez Barba, el supuesto intermediario que contactó a la exesposa de la víctima y al supuesto asesino. La presunta inductora, la abogada María Dolores Martín Pozo, hizo uso de su derecho a la última palabra para asegurar que era "inocente".
Ambas acusaciones basaron su reducción de solicitud de condena en la aplicación de la atenuante muy cualificada de ayuda a la Guardia Civil para esclarecer los hechos gracias a su confesión parcial. También aprecian la atenuante de reparación parcial del daño, pues durante el juicio ha puesto su piso a nombre de los familiares del informático asesinado.
La abogada habló sin llegar a llorar, tal y como dijo que había prometido a su hija: "No voy hacer una locura como esta porque mi vida se derrotaría. Y así ha sido. Ni los buenos son tan buenos ni los malos tan malos. Amo a mis hijos por encima de todo y voy a luchar por ellos aunque me cueste la vida", concluyó, tras explicar que era inocente y que ella no encargó el asesinato de su exmarido. Se enfrenta a una petición de pena de 43 años de cárcel.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 2 de diciembre de 2011