La primera entrega de Nick Lowe es una de sus obras maestras, reeditada y expandida en 2008. Contiene el single con el que abrió camino al punk, So it goes, y un top ten en las listas de su país, I love the sound of breaking glass, aunque reniegue de ella en vivo ("la mejor manera de saber si una canción ha prescrito es tocarla solo con la acústica"). Y el disco se prodiga en su humor irreverente. "Nunca me ha gustado tomarme demasiado en serio", asegura.
Jesus of cool
Nick Lowe
Radar, 1978
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 3 de diciembre de 2011