El nuevo presidente de la Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL), Ramon Ferrer, consideró ayer, en su toma de posesión, que en la defensa del valenciano "sobran discusiones estériles y enfrentamientos banales" e instó a todas las personas "sensibilizadas" con la lengua a "trabajar en la misma dirección".
Ferrer realizó estas reflexiones durante su discurso en el acto de toma de posesión como presidente del organismo, celebrado en el Palau de la Generalitat y al que asistió el jefe del Consell, Alberto Fabra.
Ferrer prometió el cargo "con una mezcla de agradecimiento, satisfacción y compromiso", ya que, aunque reconoció que le "emociona" ocupar la presidencia de la AVL durante el próximo lustro, "no deja de ser un reto considerable". Y recordó que "parece que fue ayer, pero la AVL cuenta ya con 10 años y a lo largo de este período los académicos hemos trabajado para ganarnos el respeto de todos, incluso de aquellos que la encontraban inconveniente e innecesaria. Si fuéramos capaces de conseguir que se supere definitivamente cualquier conflicto relacionado con el valenciano y si ganamos valencianohablantes en todos los ámbitos, la existencia de la Acadèmia habrá valido la pena", dijo.
Ferrer recordó que gracias a los Gobiernos autonómicos se ha mejorado "notablemente" la formación lingüística "de parte de la población" aunque "hay que incrementar los esfuerzos para que el uso del valenciano no decaiga y consiga la normalidad que reconoce el Estatut".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 3 de diciembre de 2011