Un acuerdo extrajudicial ha puesto paz en las relaciones entre el empresario Manuel Añón y Novagalicia Banco. El propietario de Hierros Añón ha vendido su 5,57% de la corporación industrial de la antigua Caixa Galicia y, a cambio, se ha comprometido a invertir 26,4 millones para adquirir el 1% del banco nacionalizado. Con la operación, Novagalicia recupera la totalidad de su cartera de filiales para consolidarla con la de la antigua Caixanova.
Añón será el primer inversor que compre títulos al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria, que ahora mismo es dueño del 93% del capital. El empresario había amenazado con una batalla en los juzgados para recuperar hace algunos meses su inversión, de 100 millones, en la cartera de empresas de la caja coruñesa. El artífice de la operación, cerrada a finales de 2007, fue el hijo del exdirector de Caixa Galicia, José Luis Méndez Pascual, e incluía un pacto parasocial que le daba a Añón muchos más derechos que los derivados de su paquete minoritario. Tenía una especie de acción de oro que le permitía vetar determinadas decisiones y le garantizaba la recompra de su paquete en un plazo de cinco años sin perder el valor de la inversión. El banco no ha facilitado el importe de esa operación, que debería haber contado con una devaluación de la cartera de, al menos, el 30%. La corporación Novacaixagalicia integra paquetes de acciones en 97 compañías, la mitad de ellas gallegas, que suman 12.600 millones de euros en facturación, 300 millones en beneficio y 65.000 empleos directos. Están, entre otras, Cupa Group, Sacyr, Caser, Banco Etcheverría o Tecnocom.
Ahorro gallego
El BBVA aseguró ayer, a través del director territorial de Galicia, Carmelo Beltrán, que "estudia todas las posibilidades" sobre la compra de activos de entidades como Novagalicia Banco en el caso de que se diera la oportunidad. "Sin embargo nuestra prioridad es crecer orgánicamente", recordó. Fue en la presentación de un informe sobre la coyuntura económica de Galicia elaborado por el servicio de estudios de la entidad. Su estimación de crecimiento del PIB para 2012, del 1%, coincide casi exactamente con la previsión de la Consellería de Facenda. Los economistas creen que el paro se mantendrá cuatro puntos por debajo de la media nacional y alertan de que el turismo evoluciona peor.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 3 de diciembre de 2011