El consejero de Sanidad y Consumo del Gobierno vasco, Rafael Bengoa, alertó ayer de que alrededor de 5.000 jóvenes vascos consumen a diario cannabis, lo que supone el 5% de la población entre 14 y 24 años, e insistió en que la nueva Ley de Adicciones vasca pretende "regular" la venta, consumo y cultivo de la marihuana en las asociaciones de usuarios de esta sustancia y poner así "más difícil" el consumo entre los menores. En declaraciones a los medios de comunicación tras participar en unas jornadas sobre seguridad agroalimentaria en Vitoria, Bengoa explicó cuáles son las intenciones de su Departamento respecto a una nueva regulación sobre el cannabis, después de que Sanidad anunciara el pasado lunes que trabaja en una nueva Ley de Adicciones.
El titular de Sanidad vasco aclaró o que su Ejecutivo no ha dicho "en ningún momento" que se va a legalizar el consumo de la marihuana sino que ha sido una "interpretación" utilizada en los medios de comunicación.
Bengoa alertó de que el Gobierno vasco maneja unos datos "muy preocupantes" en relación con este consumo. Según informó, el Gobierno vasco ha recibido indicaciones de "muchos maestros" diciendo que hay muchos jóvenes que consumen en la escuela y ha recordado que también hay una situación "grave" con el consumo de alcohol entre los jóvenes. Por ello, como Departamento de Sanidad y Consumo defendió que "no se puede mirar en otra dirección cuando el 5% de la población entre 14 y 24 años consume cannabis como si fuera una cosas banal", lo que supone un "problema de salud pública importante".
Mil plantas en Erandio
Por otro lado, el Cuerpo Nacional de Policía desmanteló ayer una plantación de marihuana escondida en una vivienda de la localidad vizcaína de Erandio. En la operación se intervinieron más de un millar de plantas de marihuana y se ha detenido a dos personas, de 33 y 44 años, residentes en Mungia.
La investigación se inició meses atrás al descubrir los agentes la existencia de una vivienda en la zona de Erandio que, en su parte baja y en la buhardilla, escondía un cultivo indoor o hidropónico industrial de grandes dimensiones que contenía más de 1.000 plantas de marihuana. Esta vivienda unifamiliar se encontraba arrendada desde hacía dos años por una persona que no vivía en la misma y que abonaba 1.800 euros mensuales.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 15 de diciembre de 2011