El primer Consejo de Ministros del nuevo Gobierno nombró ayer delegada del Gobierno en Andalucía a la almeriense Carmen Crespo. Tomará posesión el lunes, pero comenzará a trabajar este domingo, para cuando ha programado un encuentro de trabajo con su antecesor, Luis García Garrido.
Crespo es diplomada en Biblioteconomía y milita en el PP desde 1990. Desde 2003 ha sido la alcaldesa de Adra, su localidad natal, pero entró en el Parlamento Andaluz en 1998 y fue vicepresidenta de la Diputación Provincial de Almería durante esos años. Es una de las personas de confianza del presidente regional del PP, Javier Arenas, a quien ha agradecido su apoyo aunque reconoce que su nombramiento ha sido "una sorpresa".
Carmen Crespo se ha propuesto como principales líneas de trabajo el desarrollo del Estatuto de Andalucía y otras cuestiones relacionadas con las transferencias a la comunidad que están "en el aire", como las competencias sobre la cuenca del Guadalquivir y la responsabilidad en materia de Costas que afecta de lleno al turismo andaluz con la actuación sobre los chiringuitos.
Pero por encima de todo, dijo, está el empleo. "Me comprometo a trabajar con todas mis fuerzas, como un martillo pilón, para colaborar en la creación de empleo", y se mostró entusiasta con el discurso de Mariano Rajoy de la última semana. "Escucharlo ha sido una delicia. Sus palabras van a ser una guía para mí y las voy a seguir al dedillo".
"Defenderé nuestra tierra y actuaré con lealtad a la Junta y a todos los alcaldes de la comunidad", afirmó ayer la nueva delegada en un acto que sirvió de despedida a sus compañeros de partido en Almería.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 24 de diciembre de 2011