La primera crisis de Gobierno desde que Feijóo alcanzó la Xunta en 2009 se ha llevado por delante a cuatro conselleiros. A las bajas ya conocidas de Marta Fernández Currás en Facenda y Pilar Farjas en Sanidade se sumaron ayer las de Samuel Juárez en Medio Rural y Roberto Varela en Cultura. Las competencias de estos dos últimos se las repartirán Educación, Mar y la Presidencia de la Xunta, cuyo número de miembros se reduce así de diez a ocho.
Feijóo aligera así su Gobierno en lo que consideró un ejercicio de "austeridad" y una apuesta por la continuidad, con la hasta ahora gerente del Sergas, Rocío Mosquera, al frente de Sanidade y la interventora general de la comunidad autónoma, Elena Muñoz, en Facenda. Ninguna de ellas milita en el PP. El moderado alcance de los cambios abona la tesis de un eventual adelanto electoral a 2012.
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De las cuatro bajas de la Xunta, solo la de Currás, estrecha colaboradora de Feijóo, se puede considerar imperativa. Los otros tres conselleiros se incorporarán a puestos de menor rango en la Administración central, entre ellos el de delegado del Gobierno en Galicia, que recaerá en Juárez. En su caso, su labor se vio lastrada por los incendios del pasado octubre, igual que ocurrió con los recortes encubiertos en Sanidade con Farjas y con la paralización de la Cidade da Cultura con Roberto Varela.
Las nuevas conselleiras tomarán hoy posesión de sus cargos, para participar después en un Consello de la Xunta extraordinario. Los vencedores de la crisis son el titular de Presidencia, Alfonso Rueda, el único con el que Feijóo consultó los cambios, y Javier Guerra, que sigue en Economía pese a los escándalos del Igape.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 4 de enero de 2012