La delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo Díaz, aseguró ayer no "entender" la campaña "política de confrontación abierta y de primer nivel que la Junta de Andalucía ha iniciado contra el Gobierno de España". Según Crespo, esta actitud es difícil de entender "máxime cuando este Ejecutivo está demostrando su firme compromiso con Andalucía y está siendo sensible a los problemas de los andaluces desde el primer día", según un comunicado de la Delegación del Gobierno.
Prueba de ello, según ella,es "la celeridad" con la que el ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, recibió, nada más tomar posesión, a la consejera de Agricultura y Pesca, Clara Aguilera, y al propio sector pesquero andaluz para analizar la situación actual y plantear, como ya ha hecho, a la UE la necesidad de compensaciones financieras para armadores y pescadores y la premura de negociar un nuevo acuerdo con Marruecos.
Crespo aseguró que las críticas de la consejera Martínez Aguayo son "incomprensibles e injustificadas", tras la conversación telefónica con Montoro. "No concebimos las razones ni los intereses partidistas que están llevando a la Junta de Andalucía a abrir este enfrentamiento", señaló.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 13 de enero de 2012