No se sabe muy bien a qué diccionario recurre Mariano Rajoy para elegir la terminología de sus discursos, pero es evidente que o interpreta al revés las definiciones o es presa de algún delirio narcisista que la realidad se empeña en desmentir.
Cuando describió durante la campaña electoral con esos términos al gobernante que necesitaba España no sé a quién se referiría, pero creo que nadie puede identificar a esta persona que se ha pasado la campaña mintiendo y los primeros días de su mandato escondido para no tener que dar una explicación de por qué había mentido a los españoles, con un "gobernante con cuajo, sincero y responsable".
No sé si los votantes hubieran vuelto la mirada hacia otro candidato que prometiera subir los impuestos para impulsar la economía, por ejemplo; tal vez hubieran acertado. Ahora es tarde. Nos quedan cuatro años de sufrir "los errores y gracietas" del señor Rajoy y de sus adláteres, que hacen, pero mal, "lo que le gusta hacer a un Gobierno de izquierdas, que es subir los impuestos". (Los entrecomillados son frases pronunciadas por los representantes del PP durante la campaña electoral para referirse al Gobierno de Rodríguez Zapatero).- Emma García Allés. Madrid.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 16 de enero de 2012