El PNV no ha dado carpetazo a la disputa política que mantiene con Bildu en Gipuzkoa a cuenta de las críticas de la portavoz foral, Larraitz Ugarte, a la "mala gestión" de la anterior Diputación y las dudas que sembró sobre el destino de los 247 millones de euros de sobrecoste en la construcción de carreteras durante el mandato de los peneuvistas. Si la titular de Infraestructuras Viarias se reafirma en sus "acusaciones", el PNV contempla activar la llamada "moción de censura individual", un mecanismo legal que, en caso de prosperar, obligaría al diputado general de Gipuzkoa, Martin Garitano, a proceder al cese "inmediato" de Ugarte y sustitución.
La petición se ha cursado después de que la portavoz foral se preguntara el pasado martes "adónde ha ido a parar" el desfase de 247 millones en obras. El PNV dijo que Bildu ha traspasado las "líneas rojas" con esta insinuación y "escupido repetidamente la mano" que les tendió tras facilitar la aprobación de los primeros presupuestos de Bildu.
Aprobar una moción "individual" supone el cese inmediato de un diputado
El PNV está "a la espera" de la actitud que muestre la portavoz foral cuando acuda a la Cámara provincial. El grupo de Olano no descarta presentar una moción de censura contra la diputada Ugarte acogiéndose al artículo 59 de la norma de Organización Institucional, Gobierno y Administración de Gipuzkoa. Esta figura legal está prevista si se aprecian "responsabilidades directas" adquiridas por un diputado "dentro del área de su competencia". Su tramitación exige los mismos requisitos que una moción contra el diputado general, salvo la presentación de un candidato. Debe presentarse con el apoyo de al menos 15 junteros -el PNV tiene 14 representantes- y aprobarse por mayoría absoluta, lo que obliga al PNV a recibir el apoyo de socialistas y el PP. Los nacionalistas también han estudiado la opción de acudir a los tribunales.
Por su parte, la izquierda abertzale aseguró ayer que la polémica responde al intento del PNV de "desviar la atención de los agujeros negros" que ha dejado en la mencionada institución.
El debate 'abertzale' de Kutxabank
Aralar y Bildu coincidieron ayer en hablar sobre Kutxabak,pero con un sesgo muy diferente. Mientras Aralar hizo un llamamiento a los partidos políticos a aprovechar el próximo debate parlamentario sobre el proyecto de ley de cajas de Euskadi para "cambiar la dirección hacia la bancarización" de las entidades de ahorro vascas y convertir Kutxabank en "un banco social público". Mientras, Bildu reiteró ayer sus sospechas de que la conformación del consejo de administración de Kutxabank, del que han quedado fuera de momento junto al PSE-EE, pueda ser "ilegal",
Ainhoa Beola, miembro del consejo de administración de Kutxa y de la ejecutiva nacional de Aralar, indicó ayer que "urge" llevar a cabo "una reflexión seria" por parte de todos los partidos vascos dirigida a "convertir a un banco que está a punto de ser privatizado en un banco social público", basado en su carácter "social y ético", con el refuerzo de las inversiones en obra social, su control público y su apoyo a la economía productiva.
Bildu entiende que el consejo de Kutxabank "en ningún modo representa esa pluralidad política" y por eso reitera "nuestras dudas ante la creación de este nuevo consejo de administración y su posible legalidad", indicó la coalición abertzale, que, a su vez, recordó, que está estudiando las medidas que adoptará en el caso de que se confirme que la conformación del consejo no es legal.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 20 de enero de 2012