Algunas decenas de gargantas, varias bocinas y un megáfono lograron que una protesta de profesores interinos se tradujera en la suspensión de un acto conjunto del presidente de la Junta, José Antonio Griñán, y el alcalde de San Juan de Aznalfarache, Fernando Zamora, tras descubrir una placa en honor de Otto Engelhart, asesinado por los golpistas en 1936.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 21 de enero de 2012