Los accionistas del núcleo duro y los socios industriales, British Airwais y American Airlines pagaron 497,7 pesetas por acción el pasado 17 de marzo del 2000, frente a las 198 pesetas (1,19 euros) que pagarán los inversores que han acudido a la oferta pública de venta (OPV) de los títulos de Iberia, que mañana cotizarán en bolsa.
Según fuentes de los accionistas institucionales, con esta medida, que ha sido consensuada por el núcleo duro se intenta llegar a un acuerdo económico entre estas partes y la Sociedad Española de Participaciones Industriales (SEPI) para evitar un conflicto judicial.
Logista, que controla un 6,7% del capital de Iberia, ha comunicado hoy a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que el pasado 13 de marzo los accionistas institucionales -núcleo duro- y la SEPI acordaron, mediante escritura pública, someter a dictamen "de dos amigables componedores" si tenían derecho a devolver las acciones a la SEPI y a que ésta les revirtiera el
dinero invertido.
En concreto, Logista ha comunicado que los mediadores deberán dirimir sobre una controversia surgida de la interpretación de la "estipulación cuarta" de las escrituras de compraventa de las acciones de Iberia de 17 de marzo del 2000, relativa al ejercicio del derecho de devolución de los títulos de Iberia.
Según las escrituras, la estipulación cuarta señalaba que los accionistas institucionales podrían devolver las acciones de Iberia a la SEPI y ésta debería reintegrarles el dinero pagado si la privatización de la aerolínea no acontecía antes del 31 de diciembre del 2000.
En el comunicado enviado a la CNMV, Logista señala que los accionistas institucionales también acordaron someter a mediación -en el caso de que se reconociera el derecho de devolución de los títulos-, si dicho derecho y la renuncia a ejercitarlo de los accionistas institucionales tiene un valor económico.
Los mediadores también deberían resolver, siempre que se admitiera la existencia del derecho de devolución, cuál sería su valor económico y "la compensación que, en su caso, proceda reconocer".
Los "amigables componedores", que serán designados por las partes antes del próximo 12 de mayo, tendrán un plazo de 45 días para presentar a las partes -SEPI y accionistas institucionales- una solución completa a la controversia planteada.
La SEPI remitió el pasado 20 de marzo un comunicado a la CNMV en el que aseguraba que "en ningún caso" se podría revisar las condiciones en las que se vendieron las acciones al núcleo duro, ya que se produjo en el seno de un concurso público.
Los únicos accionistas que podrían recibir una compensación por el precio pagado son los socios industriales, Brtish Airways y American Airlines, que poseen el 10% de las acciones, ya que la venta se produjo en este caso por "negociación directa y no por concurso".