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CRISIS ECONÓMICA

La oposición argentina asume pero no avala el ajuste económico del Gobierno

Fernando de la Rúa estará presente hoy en la firma de un acuerdo que suscribirán los 14 gobernadores peronistas

El jefe del Gabinete, Chrystian Colombo, ha sido el encargado de hacer el anuncio, tras la reunión maratoniana que los gobernadores peronistas han celebrado para discutir si apoyaban o no el ajuste económico anunciado el pasado miércoles por el Gobierno.

Cuando parecía que los peronistas se iban a retirar de las negociaciones, recibieron la visita de Colombo, que anunció que el documento se firmará hoy en la Casa de Gobierno, acto al que asistirá el presidente Fernando de la Rúa. Sin embargo, el gobernador de la provincia de Salta, Juan Carlos Romero, del Partido Justicialista (peronista), ha aclarado que la firma de ese acuerdo no significa que su fuerza política avale el ajuste impuesto por De la Rúa en el gasto público.

"Eso no nos corresponde. Nosotros analizamos todo lo vinculado con la relación entre el Estado y las provincias, pero cómo llega el Gobierno nacional al déficit cero no es de nuestra competencia", ha señalado. Además, Romero, quien ha hablado como portavoz de sus colegas, ha asegurado que el Estado se había comprometido al envío rápido de los fondos que adeuda a las provincias, muchas de ellas sumergidas en crisis financieras que les han impedido pagar los sueldos de sus agentes públicos.

El ajuste ordenado por De la Rúa implica una reducción del 13 por ciento en los ingresos de los funcionarios públicos y de los jubilados que cobran como mínimo 300 pesos al mes para lograr un déficit cero en el segundo semestre del año. En su empeño de enviar a los mercados señales de sustento político para estas medidas, el Gobierno ha presionado en los últimos días a los partidos para que respaldaran públicamente el ajuste.

Sin embargo, los gobernadores de las 14 provincias controladas por el peronismo y los de las 8 administradas por la Alianza gobernante han aceptado la propuesta de llegar al "déficit cero", pero se yhan reservado la atribución de aplicar los mecanismos que crean más convenientes para alcanzar este objetivo. Sobre el ajuste, la mayoría de los políticos ha afirmado que debería ser más "equitativo" y que no recaiga todo el peso del esfuerzo sobre los sectores débiles de la economía, como los jubilados, sino sobre las grandes empresas de servicios y la banca.

Crédito agotado

A pesar de que hoy el Gobierno organizará la ceremonia de la firma con los 14 gobernadores peronistas, el respaldo al ajuste, tal como las autoridades pretendían, no figurará en el documento que se suscriba. El ministro de Economía, Domingo Cavallo, declaró la semana pasada que el país había "agotado" sus posibilidades de crédito interno y externo. En ese panorama, resolvió que del Estado no saldría un peso más del que se recaudara por impuestos, por lo que reducirían los pagos de salarios, jubilaciones y deudas con los proveedores.

El ajuste tampoco ha caído bien en la Alianza gobernante. La mayoría de sus dirigentes sostuvo que se trata de un plan poco equitativo, ya que no afecta a las grandes empresas de servicios y la banca. Los bancos que operan en el país han anunciado, hoy también, que adelantarán 500 millones de dólares al Estado a cuenta del pago del impuesto a las ganancias, en respuesta a la petición de un "esfuerzo patriótico" que hizo el Gobierno.

El grupo español Repsol-YPF fue el primero en reaccionar ante el llamamiento oficial en medio de la crisis y puso a disposición del Estado, la semana pasada, 150 millones de dólares como anticipo de impuestos y en contribución a la estrategia para sacar al país de la crisis.