Los atentados del 11 de septiembre siguen provocando devastadores efectos en el sector aéreo estadounidense. La sexta compañía aérea de Estados Unidos, US Airways, ha anunciado esta noche una pérdida de 766 millones de dólares (más de 137.000 millones de pesetas, casi 830 millones de euros) en el tercer trimestre del presente ejercicio.
US Airways ha resultado más afectada que otras compañías estadounidenses tras los atentados terroristas debido al cierre, durante semanas, del aeropuerto Nacional Reagan de Washington debido a su cercanía con la Casa BLanca ante posibles nuevos ataques. Esta medida ha afectado a la compañía, ya que este aeródromo es el punto de partida de la mayor parte de sus operaciones.
En respuesta a la crisis, US Airways ha procedido a la supresión de 11.000 puestos de trabajo y retrasar la compra de tres de los 12 Airbus A321 prevista para el periodo 2002-2006.