La Comisión de Expertos a la que el Gobierno encargó un informe sobre el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) propone en su documento presentado esta mañana una reducción del tipo marginal máximo de la tarifa del impuesto al 45%, y el mínimo al 15%, frente al 48% y 18% vigentes actualmente.
El documento también propone reducir a cuatro el número de tramos frente a los seis actuales, según ha explicado en una conferencia de prensa el presidente de esta comisión, el catedrático de Hacienda Pública, Manuel Lagares.
Durante el acto de presentación del documento en el Ministerio de Hacienda, Lagares ha añadido que el nuevo IRPF, cuya entrada en vigor está prevista para el 1 de enero del 2003, debería avanzar hacia una reducción de los tramos y los tipos de la tarifa con el horizonte del 40% en el marginal máximo, respetando la progresividad del impuesto, su eficiencia y su contribución a las cuentas públicas.
Además, el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Juan Carlos Aparicio, ha confirmado que el nuevo (IRPF) incluirá medidas que "reconocerán el esfuerzo" de la movilidad geográfica.
En su opinión, la movilidad geográfica es una "gran fórmula" para casar las ofertas y las demandas laborales en la UE, además de ser un elemento importante para la lucha contra el desempleo en los próximos años. Por ello, aseguró, las próximas propuestas del Gobierno irán encaminadas en esa línea.
Ahorro a largo plazo
Por su parte, representantes tanto del Partido popular como del PSOE han insistido en la necesidad de que el nuevo IRPF establezca mecanismos que incentiven el ahorro a largo plazo.
El portavoz de Economía del grupo parlamentario popular, Martínez Pujalte ha justificado su postura por la conexión que, a su juicio, mantiene el ahorro con el crecimiento económico y la estabilidad presupuestaria, además de contribuir a la cohesión social y facilitar las relaciones laborales.
Apunta que desde que, en 1996, el Partido Popular asumió el Gobierno, "se han tomado muchas medidas encaminadas al fomento del ahorro".
Así mismo, el portavoz popular ha precisado que la nueva reforma del IRPF debe buscar la "neutralidad" de los productos de ahorro, de modo que "los ciudadanos elijan más según la rentabilidad que ofrecen y menos en función de su marco tributario".
Por su parte, el portavoz de Hacienda del grupo parlamentario socialista, Germá Bel, ha asegurado que los cambios en fiscalidad de los últimos años, "no han tenido efecto relevante en el ahorro financiero de las familias", ya que éste refleja "una disminución persistente".
En su opinión, hay que fomentar la capacidad de ahorro de las familias, sobre todo si es a largo plazo y en aquellas situaciones en las que "realmente se puedan plantear problemas de poder adquisitivo tras una jubilación", y eliminar el "peaje fiscal por cambio de fondos de inversión".
Ambos representantes políticos han realizado estas observaciones en una mesa redonda sobre el tratamiento fiscal del ahorro en el siglo XXI, y coincidieron en que en España esta variable económica es menor que en el resto de la Unión Europea.