El presidente del Banco Central Europeo, Wim Duisenberg, no ha dado datos económicos alentadores a los países de la zona euro. El BCE asegura que aunque la presión inflacionista sigue reduciéndose no disminuyen los riesgos desfavorables para el crecimiento económico.
Duisenberg ha comparecido ante la comisión económica y monetaria del Parlamento Europeo, para explicar las últimas decisiones de política monetaria adoptadas por el BCE y analizar la situación macroeconómica general en los países del euro.
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El presidente de la máxima autoridad monetaria europea, que decidió mantener los tipos de interés tras la reunión celebrada el 7 de noviembre ha señalado que las expectativas de una mejora de la actividad económica en la zona euro "depende del actual alto nivel de incertidumbre mundial y de la recuperación del consumo privado".
Duisenberg también ha dicho que esa recuperación también está basada "en una recuperación gradual de la demanda mundial que, junto con niveles bajos de tipos de interés, ayudaría a fortalecer la inversión".