El presidente del grupo Fiat, Paolo Fresco, ha anunciado hoy que está dispuesto a abandonar su cargo en julio y ha querido dejar claro que no lo hará antes por la situación "particularmente difícil" que atraviesa la multinacional de Turín.
Fresco ha asegurado que ya había adoptado esta decisión y se lo había comunicado al presidente de honor de Fiat, Giovanni Agnelli. "Le dije que en julio de 2003, cuando tendré 70 años, dejaría mi puesto", ha dicho al diario italiano La Repubblica.
MÁS INFORMACIÓN
- La familia Agnelli toma las riendas de la crisis de Fiat y arremete contra la cúpula
- Protestas en las plantas italianas de Fiat ante las negociaciones de hoy
- Los trabajadores de Fiat protestan en toda Italia contra los despidos
- El consejo del grupo Fiat afronta la continuidad de sus dos máximos ejecutivos
- Los sindicatos italianos rompen la negociaciones para reestructurar Fiat
En relación con las críticas vertidas la pasada semana por el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, contra la dirección de Fiat, el presidente de la compañía se ha limitado a señalar: "pensé que se había vuelto loco".
El consejero delegado de Fiat, Gabriele Galateri di Genola, informó ayer al consejo de la compañía de su intención de dimitir. El máximo órgano de dirección de la empresa tiene previsto reunirse mañana para designar a su sustiuto. Para esta mañana se esperaba que Fresco, que ayer evitó comunicar su futuro en la compañía, anunciara hoy su abandono.