El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, recibe mañana al secretario general de CC OO, José María Fidalgo, con el que analizará la situación de la economía y el mercado laboral con vistas a firmar un gran pacto social por la competitividad y el empleo de calidad.
Zapatero inició ayer, con el presidente de la CEOE, José María Cuevas, el diálogo social con la patronal y los sindicatos para conocer las futuras reformas económicas, laborales y sociales que podrían aplicarse para mejorar la productividad y lograr más y mejor empleo. Cuevas concluyó que el Gobierno y los agentes sociales coinciden en la necesidad de "huir" de elaboraciones "simplistas" a la hora de acometer reformas, así como en que sería "bueno" que un Grupo de Expertos hiciera un "diagnóstico" al respecto y propusiera medidas.
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Los primeros contactos de Zapatero con los interlocutores sociales finalizarán el martes, cuando reciba en La Moncloa al secretario general de UGT, Cándido Méndez. Posteriormente, prevé reunirse durante la segunda quincena de junio, tras las elecciones europeas, con Cuevas, Fidalgo y Méndez para articular cómo se desarrollará el proceso de diálogo social, así como las reformas que han de ponerse en marcha.
Tanto el ministro de Trabajo, Jesús Caldera, como el presidente de CEOE acordaron ayer encargar a un grupo de expertos y especialistas independientes la elaboración de un análisis sobre temas concretos, como temporalidad, siniestralidad laboral o prestaciones sociales, para conseguir más objetividad.
Las reformas progresistas, "piedra angular" del diálogo social
Por su parte, el secretario de Acción Sindical de UGT, Antonio Ferrer, ha declarado hoy que las reformas progresistas deben ser la piedra angular para el sindicato y tienen que tener una clara utilidad para reconducir" el empleo y la precariedad. Asimismo, señaló que el diálogo social debe regular de forma adecuada la utilización causal de la contratación temporal, los procesos de descentralización productiva y la subcontratación.