Grecia está en bancarrota y probablemente necesite un "descuento" que perdone al menos el 50% de su deuda, según ha advertido hoy un importante parlamentario conservador alemán. Michael Fuchs, el sublíder del comité parlamentario del partido Demócrata Cristiano de la canciller Angela Merkel, ha dicho al diario Rheinische Post que Grecia está quebrada pese a toda la ayuda financiera que le ha dado la Unión Europea.
"Grecia está en quiebra. Probablemente no hay otra manera que aceptar al menos una quita del 50% de sus deudas", ha afirmado Fuchs, que también es el presidente del influyente grupo de pequeños empresarios de su partido en el Parlamento, en el mismo día en el que se reúne el Eurogrupo para analizar los avances en los planes de ajuste de Atenas.
La opinión de Fuchs no es un análisis aislado sobre el desbordamiento de los problemas en Grecia, que ayer advirtió de que no podrá cumplir con los objetivos de déficit fijados en el programa de recuperación de la sostenibilidad fiscal pactado con la UE y el FMI.
Junto a Alemania, desde Holanda también llegan presiones para que los acreedores privados asuman una quita de hasta el 50% sobre los bonos griegos en el canje de títulos previsto, muy superior al porcentaje base del 21% acordado en la cumbre de finales de julio.