El presidente francés Nicolas Sarkozy y la canciller alemana Ángela Merkel han convocado hoy una nueva cumbre europea "para antes del miércoles", para "adoptar definitivamente los acuerdos adoptados el próximo domingo por los jefes de Estado y de Gobierno.
La convocatoria imprevista de esta segunda cumbre confirma las grandes dificultades existentes para alcanzar un acuerdo sobre la recapitalización de la banca, al aumento de la capacidad del FEEF y la asunción de más pérdidas por la banca en el nuevo rescate de Grecia. La decisión de Berlín y París es la respuesta a la negativa del presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy a aplazar la cumbre del domingo como pedía Berlín para disponer de más tiempo para lograr un pacto global. La cumbre del domingo queda así seriamente devaluada y todo queda pendiente hasta la segunda cumbre.
"Francia y Alemania han acordado que el conjunto de los elementos de esta respuesta global y ambiciosa (a la crisis de deuda) se examinará de forma profunda en la cumbre del domingo para poder ser adoptada definitvamente por los jefes de Estado y de Gobierno en una segunda cumbre como
muy tarde el miércoles", han anunciado París y Berlín en un comunicado conjunto.
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, y la canciller alemana, Angela Merkel, han hablado este jueves por teléfono y han acordado reunirse de nuevo el sábado por la noche en Bruselas para preparar las reuniones.
Los dos dirigentes se han comprometido a adoptar "una respuesta global y ambiciosa a la crisis que atraviesa actualmente la zona euro". El plan incluirá "nuevas modalidades de intervención" del fondo de rescate, la recapitalización de la banca europea, el refuerzo de la integración económica y una "solución sostenible" a la situación en Grecia.
"Las autoridades griegas deberán adoptar compromisos ambiciosos para corregir la situación de su economía en el marco de un nuevo programa" de rescate", avisan París y Berlín, que además reclaman "iniciar de inmediato negociaciones con el sector privado para encontrar un acuerdo que permita reforzar la sostenibilidad de la deuda".