Unos desconocidos colocaron anoche un artefacto explosivo, que no llegó a estallar, en la entrada de la academia de enseñanza que el diputado general de Alava, Ramón Rabanera, del Partido Popular, tiene en la Plaza Zaldiaran de Vitoria, según ha informado la Ertzaintza. El artefacto estaba compuesto por cuatro bombonas de cámping-gas, dos aerosoles y un petardo que debía actuar de iniciador. Se trata del quinto ataque perpetrado contra el negocio de Rabanera.
Pese a la capacidad del artefacto, la policía autónoma vasca ha señalado que sólo explosionó el petardo, por lo que los daños causados se redujeron a un ligero ennegrecimiento de la entrada al local. El suceso, que se produjo sobre las 22:25 horas de ayer, es uno de los numerosos ataques que ha sufrido a la academia del actual diputado general de Alava a lo largo de los últimos meses.
El diputado general de Alava, Ramón Rabanera, ha condenado este ataque, el quinto sufrido una de las sedes de su academia de estudios, y ha apeladoi al nacionalismo democrático a que "abandone el mensaje de equidistancia, que está falto de moral". "Por mucho que me intenten intimidar y violentar -ha subrayado- yo voy a seguir luchando por lo que creo, en la libertad de los ciudadanos".
"Hacer mucho daño"
Rabanera, que también ha sido objeto fallido de un atentado de ETA, ha explicado que, por los datos que le han facilitado, los autores "tenían intención de hacer mucho daño".
Además, ha abogado porque el nacionalismo democrático "se dé cuenta de una vez por todas de que lo que se necesita es la unión de los demócratas, sin esa equidistancia que muchas veces mantiene el mundo nacionalista al hablar de que están entre unos y otros". "Entre unos y otros no. Yo me siento violentado, privado de libertad, en peligro y los otros son los que ponen en riesgo mi vida, mis propiedades y la libertad de todos los ciudadanos", ha sentenciado.
Cortes de calles
Además de este atentado fallido, grupos violentos aprovecharon las celebraciones del carnaval para cortar, a las 20:15 horas de ayer, el tráfico en la calle Ribera de Bilbao, junto al Casco Viejo, donde colocaron barricadas con contenedores de basura y coches cruzados. Además apedrearon un autobús de transporte urbano que circulaba por el lugar al que le rompieron varios cristales. En el incidente no se registraron heridos y cuando llegaron las fuerzas de la Ertzaintza los alborotadores ya habían huido del lugar.
Poco antes de las 23.00 horas se produjo un nuevo incidente ante la Comandancia de Marina, en San Sebastián, contra la que un grupo de encapuchados lanzó varios cócteles incendiarios, causando daños escasos, según la Ertzaintza.