El presidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol, ha dicho hoy que "no se puede permitir que la inmigración destruya nuestra identidad y no creo que ésta sea una afirmación racista". Pujol ha hecho estas declaraciones en una rueda de prensa tras presidir la inauguración del Museu Episcopal de Vic (Barcelona).
Se ha referido también a los mecanismos de control de inmigrantes en países como Holanda o Francia y que no existen en Cataluña. En su opinión, "se debe redefinir la doctrina que se aplica en los temas de inmigración".
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Para Pujol, los inmigrantes "deben asumir que la sociedad que los recibe debe seguir siendo como es". "No pueden imponer nada a los que los acogen".
"Mucha de la gente catalana importante nació en el extranjero o es de padres extranjeros y con eso se demuestra que tenemos un sistema social que permite la promoción de la gente", ha añadido.
Jordi Pujol ha destacado además que la inmigración de la autonomía que preside "es distinta de la que hay en Madrid, ya que en Cataluña" hay más inmigrantes y "los orígenes son distintos, son magrebíes, subsaharianos o pakistaníes".
En este sentido, el presidente catalán ha subrayado el factor lingüístico. "Es muy importante que los inmigrantes vengan con la voluntad de ser catalanes". "Tanto los que estamos aquí como los que vienen tenemos unos derechos y unos deberes y debemos cumplirlos", ha añadido.