El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, ha advertido de que dará por finalizada la colaboración de CiU con el Gobierno central, ya sea del PP o del PSOE, si no hay un "cambio radical" en la próxima legislatura sobre el autogobierno de Cataluña. Pujol ha realizado estas afirmaciones en su discurso de apertura del Debate de Política General, el último suyo como jefe del ejecutivo catalán.
El president ha hecho balance de su mandato y ha defendido que su proyecto es "bueno" hasta el 2010, con diversas referencias a su delfín, el conseller en cap y candidato de CiU a la presidencia de la Generalitat, Artur Mas, para que lidere este proyecto en los próximos años.
En sus críticas al Gobierno, Pujol ha acusado a José María Aznar de "atentar contra la lealtad constitucional" y de "desaprovechar una oportunidad histórica", y con ella su "credibilidad", por propiciar que Cataluña "no se sienta cómoda" en España "al no satisfacer su "necesidad" de más autogobierno.
El discurso de Pujol ocupará este primer día de los tres del debate de política general, que también será el último para Rafael Ribó (ICV) y Alberto Fernández Díaz (PP) como líderes de sus respectivas formaciones en el Parlament.
Mantener a CiU
El presidente del PSC, Pasqual Maragall; el del PP, Alberto Fernández; el secretario general de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira, y el presidente del grupo parlamentario de ICV, Rafael Ribó, tomarán la palabra mañana y este segundo día de debate lo cerrará el portavoz parlamentario de CiU, Ramon Camp.
El jueves, último día del debate, los grupos parlamentarios presentarán sus propuestas de resolución, que se votarán por la tarde. En teoría, este debate sirve también para poner fin al periodo de reflexión sobre sus relaciones con CiU y para decidir si continúa prestando su apoyo a esta formación en el Parlament o si se lo retira.