Cinco presuntos responsables del aparato logístico de ETA, hasta su desarticulación en septiembre de 2000, y otros ocho supuestos colaboradores de la banda han comparecido hoy en la primera audiencia en el Tribunal Correccional de París. Los cinco primeros han reconocido su "militancia", y se han empleado a fondo para exculpar puntualmente a los otros acusados.
Se trata de José Luis Turrillas Aranceta, Peputo (45 años), jefe del aparato de logística, Agurtzane Delgado Iriondo, Artuxan Guru (44), encargada de falsificación de documentos, Iñaki Santesteban Goikoetxea, EinsteinAtxuri (45), jefe de "mugas", y el encargado de materiales Jesús María Zabala Muguira, Smeril (44).
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Los cinco, que fueron detenidos en la redada que siguió al arresto el 15 de septiembre de 2000 en la localidad vascofrancesa de Bidart del entonces considerado como número uno de ETA, Ignacio Gracia Arregui, Iñaki de Renteria, han exculpado, por otra parte, a seis allegados, amigos o conocidos juzgados junto a ellos.
A los once, que hoy han estado presentes en la sala, y a otros dos supuestos etarras -Tomás Elgorriaga Kunze (39 años) e Ibon Elorrieta Sanz (25), que son juzgados en rebeldía-, se les imputa asociación de malhechores con fines terroristas.
"Enemigos del pueblo vasco"
Nada más comenzar la vista de hoy, Delgado Iriondo, ha dejado clara su postura y la de sus compañeros ante el tribunal: "Estamos en un conflicto y ustedes han elegido ser enemigos del pueblo vasco".
Turrillas ha explicado más tarde, casi al término de la vista, que él, Delgado, Santesteban, Pikabea y Zabala pertenecen a "la generación que sufrió el franquismo", ha denunciado la creación de los GAL, la "deportación" por Francia de etarras a otros países y las posteriores "expulsiones en masa".