El juez de la Audiencia Nacional Guillermo Ruiz Polanco ha ordenado hoy el ingreso en prisión de los 16 presuntos miembros del Grupo de Partidarios de la Corriente Salafista (DHDS) detenidos en Cataluña el pasado viernes por su supuesta relación con la organización terrorista Al Qaeda.
El juez ha adoptado esta decisión después de tomar declaración a los 16 detenidos, en una diligencia que apenas ha durado una hora y media, ya que todos ellos se han ratificado en las declaraciones que previamente habían realizado ante la Policía: han insistido en su inocencia y han negado todas las acusaciones.
No obstante, el juez, tal y como había solicitado el fiscal, ha decidido ordenar su ingreso en prisión basándose en los indicios que contra ellos sostenía la comisión rogatoria petición de ayuda judicial) que cursaron a España las autoridades francesas, en previsión de que la justicia gala pueda solicitar la extradición de los detenidos y en nuevos indicios aparecidos en la investigación realizada, según fuentes jurídicas.
Plan para atentar en Estrasburgo
La comisión rogatoria cursada por las autoridades francesas se refiere a la investigación de un plan para atentar contra la catedral de Estrasburgo, desbaratado por la Policía alemana en diciembre de 2000, según las citadas fuentes.
La comisión rogatoria, remitida al juez Ruiz Polanco, indica que los detenidos en Cataluña se reunieron con los presuntos autores del plan y facilita las identidades de varios de ellos, mientras que de otros aporta una descripción de sus características físicas y el domicilio que supuestamente ocupaban en España, lo que dio lugar a la operación policial Lago que llevó a las dieciséis detenciones.
El Ministerio del Interior, que vincula a los arrestados con la red terrorista de Al Qaeda, considera que la red desarticulada en Cataluña estaba dividida en dos grupos, uno radicado en Barcelona y dirigido por el argelino Mohamed Tahraqui y otro asentado en Bañolas (Gerona) y que tenía como cabecilla al también argelino Bard Eddin Ferdji, detenido en Olot.
Los arrestados, según Interior, proporcionaban información e infraestructura a otros grupos terroristas islámicos, disponían de explosivos, utilizaban productos químicos y tenían conexiones con células terroristas establecidas en el Reino Unido y Francia.
A los detenidos se les ha intervenido abundante material electrónico, temporizadores, mandos a distancia, conectores, manuales sobre circuitos electrónicos, ordenadores y diversos escritos en árabe, entre otros objetos.
La Policía considera que los detenidos en Cataluña falsificaban documentos para uso de los activistas de la red, utilizaban fraudulentamente tarjetas de crédito sustraídas y "clonadas" y adquirían material, sobre todo de comunicaciones, como dos emisoras y una antena, para emitir a Argelia o Chechenia.