Medio millón de personas, según los convocantes, y 15.000, según la policía, se han dado cita en las inmediaciones de la Puerta de Alcalá de Madrid en el maratón Música por la paz, organizado por la plataforma Cultura contra la Guerra y las asociaciones y partidos que la apoyan. El acto, que se desarrolló en todo momento en un ambiente festivo, alternó la participación de más de 20 artistas con la lectura de varios manifiestos e intervenciones.
Entre otros, han tomado la palabra la actriz Rosa María Sardá, quien leyó un texto del escritor José Luis Sampedro, y el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, quien se acompañó para la lectura de su hija María. También se dio lectura a un escrito del teólogo Juan José Tamayo y a otro del rector de la Universidad Carlos III, Gregorio Peces Barba.
"No nos importa el petróleo porque somos pobres, pero no miserables", espetó Sampedro a la ministra de Asuntos Exteriores, Ana Palacio por boca de Rosa María Sardá y del actor mexicano Gael García Bernal, "Sadam es un tirano, pero Bush no es quién para juzgarle. Eso tiene que hacerlo la ONU", añadió.
El juez Garzón, quien no había confirmado su presencia debido a que estaba de guardia en la Audiencia Nacional, se dirigió a los presentes en compañía de su hija María y calificó la intervención bélica en Irak de "atentado contra la Humanidad" y "macabra farsa". "El silencio no es nunca una opción, ni ética, ni política, ni religiosa", añadió, para que su hija finalizase con: "Este es nuestro compromiso: No a la guerra".
Por otra parte, el Gran Wyoming, presentador del concierto, criticó al Ayuntamiento por no haber permitido que se montase el escenario bajo la Puerta de Alcalá, y obligar a que su ubicación final fuese bajo la Puerta de la Independencia del Parque del Retiro. Además, se dirigió a Aznar para explicarle que "a nosotros nos conmueve tanto la muerte de un niño iraquí como la muerte de un niño asesinado por ETA. No les miramos el pasaporte".
Respeto al PP
Javier Gurruchaga centró gran parte de su improvisada intervención en dirigirse a los votantes del PP y en diferenciar su postura de la de los votantes de su partido, ya que también se encuentran en ese 91% de españoles que se pronuncian en contra de la guerra. Además dijo que "hay que respetarlos y no agredirlos porque no tienen culpa de lo que hace Aznar".
Las actuaciones corrieron a cargo de Ana Belén, Víctor Manuel, Cómplices, Miguel Ríos, Frank T, La Hora Bruja, La Vargas Blues Band y Mercedes Ferrer, entre una lista de casi 30 músicos o grupos. Sabina, que no acudió, era quien tenía que haber cerrado el concierto, que acabó pasadas las cuatro de la tarde, cuando estaba previsto que lo hiciese a las tres.
Llamazares compara a Aznar con McCarthy
Los secretarios generales de UGT y CC OO, Cándido Méndez y José María Fidalgo, han apoyado con su presencia el concierto contra la guerra. En declaraciones a los periodistas, Cándido Méndez ha abogado por "mantener, sostener y amplificar el impulso ético contra la guerra, del que participa la inmensa mayoría del pueblo español y los trabajadores y trabajadoras de España".
Por su parte, el coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, ha acusado también desde la Plaza de Alcalá a Aznar de haber abierto "una guerra interna en España" contra políticos, jueces y ex embajadores españoles en Bagdad y de haber emprendido "una caza de brujas" al estilo del senador estadounidense McCarthy.
Y la secretaria general de ONG y Movimientos Sociales del PSOE, Leyre Pajín, ha calificado de "profundamente irresponsable" la actitud del presidente, que parece empeñado en "crispar la vida política" española. Junto a ella, la candidata socialista a la Alcaldía de Madrid, Trinidad Jiménez, ha destacado hoy que "un día más los madrileños salimos a la calle" para decirle al Gobierno que "no se puede continuar con esa tragedia y este horror que se está produciendo en Irak".