Los miembros de la comisión de investigación del 11-M han acordado hoy por unanimidad comenzar a trabajar en las conclusiones y celebrar una reunión el 7 de septiembre para ponerlas en común y fijar, si fuera necesario, nuevas comparecencias. La comisión ha celebrado esta tarde una reunión a puerta cerrada para ordenar los trabajos, una vez finalizada la última comparecencia de las previstas, la del ministro del Interior, José Antonio Alonso.
El presidente de la comisión, Paulino Rivero, ha explicado
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después en rueda de prensa el acuerdo alcanzado a propuesta suya, que consiste en que cada grupo parlamentario comience por su cuenta a redactar las conclusiones extraídas de las comparecencias celebradas y de la documentación recibida. Los grupos volverán a reunirse el día 7 de septiembre a mediodía para empezar a poner en común las conclusiones y tratar de redactar el dictamen, que debe ser aprobado por el pleno de la comisión para después ser elevado al pleno del Congreso de los Diputados.
Si en esa reunión algún grupo considerara necesaria la celebración de alguna nueva comparecencia para concluir los trabajos antes de redactar las conclusiones, se debatiría y, en esa misma reunión, se fijarían esas nuevas declaraciones.
Rivero ha dejado claro que en la reunión de hoy no se ha cerrado la puerta a nuevas comparecencias en septiembre, como tampoco han dado por seguro que se celebrarán. Dependerá, ha dicho, de las conclusiones que cada uno extraiga y de la necesidad que valoren de completar la información.