El secretario general del Partido Popular, Angel Acebes, ha calificado de "cacicada inaceptable" la reforma de la Ley Constitucional aprobada ayer en el Congreso de los Diputados con los votos a favor de todos los partidos menos el PP y la abstención del PNV. La ley prevé la prórroga del mandato del presidente y del vicepresidente del Tribunal Constitucional hasta su renovación.
El tribunal está formado por 12 magistrados con un mandato de nueve años: cada tres años son sustituidos cuatro de los magistrados, y se nombra un presidente y un vicepresidente. La nueva ley prevé que “si el mandato de tres años para el que fueron designados como presidente o vicepresidente no coincidiera con la renovación del Tribunal Constitucional, tal mandato quedará prorrogado para que finalice en el momento en que dicha renovación se produzca y tomen posesión los nuevos magistrados”. A pesar de no ser obligatorio, esta práctica se venía haciendo en la práctica, siempre y cuando los magistrados se ponían de acuerdo en hacerlo.
"Si se cambian las reglas de juego a mitad de partido estamos teniendo una rebaja democrática importantísima y cambiar las reglas de juego sin consenso y sin el acuerdo del principal partido de la oposición es un profundo error y una tremenda equivocación", ha afirmado hoy Acebes. Asimismo, el líder del PP atribuye al ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, la reforma de la Ley, y considera que, "nada más tomar posesión", ordenó al Grupo Socialista en el Congreso "no llegar a ningún acuerdo y ningún pacto con el PP".
La presidenta del Constitucional, María Emilia Casas, ha dicho hoy que "hay una costumbre de prórroga del mandato de presidentes y vicepresidentes que podría respetarse en esta ocasión ¿Por qué no se iba a hacer? El pleno decidirá, yo tampoco sé cuando va a entrar en vigor la ley, lo que señaló es que no tiene por qué afectar necesariamente a la situación actual”.