El PP catalán ha eludido cualquier autocrítica pese a no haber logrado su objetivo de acortar diferencias con el PSC en Cataluña, y ha apelado a la "responsabilidad de los partidos que forman el tripartito" para que las generales no alteren la estabilidad política en Cataluña.
Tras la reunión de la Permanente del PPC, su presidente del PPC, Daniel Sirera, ha dicho que su partido, que en las elecciones de ayer obtuvo siete diputados, confía en que el voto de los españoles residentes en el extranjero les dé un octavo diputado en detrimento de CiU.
Sirera ha calificado de "positivo" el resultado de ayer porque el PPC ha aumentado sus escaños y ha crecido en "porcentaje" de votos, si bien ha obtenido 21.143 votos menos que en 2004,
cuando en Cataluña pasó de lograr doce a seis escaños.
"Es verdad que Rajoy no es presidente, pero hemos hecho nuestra aportación desde el PPC", ha dicho Sirera, que ha lamentado no tener representación en Girona.
Por otra parte, Sirera ha apuntado que el PPC está a "escasos 70 votos" de lograr un octavo diputado, y ha recordado que esa cifra era el "objetivo marcado" por el PP catalán para estas
elecciones.