Tras defender ayer con firmeza que el despliegue del Estatuto seguirá su curso al margen de lo que decida el Tribunal Constitucional, el presidente de Cataluña, José Montilla, se ha reafirmado hoy en esta tesis, en la Diada del Onze de Setembre. "Un tribunal puede tocar una ley pero no un pacto político. No vamos a renunciar a ninguno de los objetivos del pacto", ha afirmado en una entrevista en la Cadena Ser.
Montilla ha asegurado que sus declaraciones no suponen ninguna presión ante la próxima sentencia que puede recortar algunos de los artículos del texto. "No es una presión, presión es la que hacen muchos desde hace tiempo como aquellos que apremian al Constitucional. Presiones son las recusaciones que se pusieron en marcha para deshabilitar a un magistrado desde la sede del PP en la calle Génova, presiones son no cubrir la vacante de un magistrado que falleció o no renovar un tribunal cuando el mandato para el que se le eligió ha caducado", ha argumentado.
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Voces trasnochadas en el PSOE
El presidente de la Generalitat ha asegurado que su objetivo es que Cataluña encuentre un encaje en España y ha reprochado al PP por, en su opinión pretender lo contrario. "Desde el principal partido de la oposición se trabaja para que no haya encaje. Algunos parece que quieren que nos fuéramos". Preguntado por las críticas de determinados miembros del PSOE que cuestionan la constitucionalidad del Estatuto, Montilla ha admitido que hay "algunas voces trasnochadas".
De cara a las próximas elecciones autonómicas, Montilla ha garantizado que su intención es agotar la legislatura y no ha precisado si se intentará reeditar la coalición PSC-ERC-ICV. "Lo que puedo decir es que cada fuerza política concurrirá por separado con proyectos que no son coincidentes. Cada uno se presentará con su proyecto propio", ha indicado Montilla.