La fachada del Palacio de Capitanía Militar de Barcelona, en el paseo de Colón, luce desde hoy el escudo constitucional. Los trabajos de instalación de la placa han durado tres meses y han permitido sustituir, 35 años después de la muerte de Franco, el escudo franquista con el águila, el yugo y las flechas y la leyenda "una, grande y libre".
El escudo franquista, sin embargo, no ha desaparecido del todo: permanece oculto bajo el nuevo escudo, que ha sido superpuesto. Con esta actuación, el Ministerio de Defensa se ajusta a la ley.
Ahora ya sólo queda una instalación militar con emblemas franquistas: el edificio del Gobierno Militar de Barcelona, en el Portal de la Pau. El águila será sustituida en unos días.