El obispo saliente de Bilbao, Ricardo Blázquez, ha afirmado esta mañana que tiene la impresión de que "ETA pronto va a renunciar", al tiempo que ha destacado los esfuerzos a favor de la paz realizados por la Iglesia vasca y la importancia de estar cerca de las víctimas del terrorismo.
El próximo arzobispo de Valladolid ha hecho estas afirmaciones en una entrevista en Radio Euskadi, en la que ha reconocido que el problema de la violencia terrorista y las víctimas han sido capítulos muy importantes de su trayectoria al frente de la diócesis de Bilbao.
"No sé si es un deseo, una esperanza, también un presentimiento, una convicción de que ETA pronto va a renunciar; esta impresión yo tengo", ha afirmado Blázquez al ser preguntado si cree que el final del terrorismo está cerca.
El obispo saliente también ha destacado el compromiso de los prelados vascos con las víctimas, con las que ha dicho: "hemos estado cerca lo mejor que hemos podido" y "de forma muy discreta", y ha recordado que en 1998 la Iglesia pidió perdón a las víctimas si en algo no se había estado a la altura.
Blázquez ha sido preguntado también por los casos de corrupción en el ámbito político y ha mostrado su rechazo "absoluto e inequívoco" a todo hecho corrupto "venga de donde venga, proceda del partido político que proceda".
"La corrupción es una inmoralidad que no debe tener lugar en ninguno de nosotros, pero los que han sido elegidos para actuar en nombre de la sociedad tienen una obligación particular de ser limpios en la administación de lo que a toda la sociedad pertenece", ha añadido el obispo.
Preguntado por los casos de pederastia que han afectado a la Iglesia Católica, Blázquez ha mostrado su rechazo, ya que es algo que "contraría gravemente la moral cristiana".
Pese a que tuvo un recibimiento "un poco hosco" a su llegada a la diócesis bilbaína, el obispo ha mostrado su pesar por la despedida, ya que muchos le han "pedido disculpas" y ahora le despiden "con pena".