El ex novio y la ex psiquiatra de Anna Nicole Smith, acusados de su muerte

Un jurado de la Corte Superior de Los Ángeles (California, Estados Unidos) ha declarado culpable este jueves de la muerte de Anna Nicole Smith a Howard Stern y Khristine Eroshevich, el ex novio y la ex psiquiatra de la modelo, según han informado las autoridades locales. La conejita de Playboy falleció de sobredosis en 2007, a los 39 años . Sandeep Kapoor, el médico personal de Smith, ha sido absuelto de los seis cargos que se le imputaban.

El doctor Kapoor, al igual que Stern y Eroshevich, estaba acusado de conspiración para suministrar de forma ilegal fármacos opiáceos y sedantes a Smith. A Stern se le ha encontrado culpable de proporcionar falsos nombres y de fraude a la hora de obtener medicamentos. A Eroshevich se le imputa el haberle recetado a la modelo un calmante de forma ilegal.

Durante las audiencias previas a la decisión final del jurado, se supo que Smith pasó sus últimos días en estad de semiinconsciencia, incapaz de andar y alimentándose con un biberón. Finalmente fue trasladada a un hospital de Florida, en donde se certificó su muerte como un accidente por abuso de sedantes. El fallecimiento fue seguido por una investigación que durante más de tres años ha rastreado las sustancias encontradas en el cuerpo de la modelo.

Los abogados de la defensa argumentaron que Smith necesitaba los sedantes para combatir el dolor causado por la cesárea practicada para el nacimiento de su hija Danielynn en 2006, además de para resistir el trauma de la muerte pocos días después de su hijo mayor, de 20 años, por sobredosis de metadona. Smith utilizaba nombres falsos para adquirir los medicamentos con el fin de proteger su privacidad, según los acusados.

La muerte de Smith fue el último capítulo de una vida tumultuosa que incluyó un matrimonio con el multimillonario J. Howard Marshall y numerosas batallas legales en defensa de la herencia que le dejó el octogenario magnate del petróleo tras su muerte tan solo 12 meses después de casarse.

Después del fallecimiento de Smith, los juicios continuaron para determinar el lugar en el que la explosiva heredera sería enterrada, así como la paternidad y custodia de su única hija, Danielynn, ahora en manos de su padre biológico, el fotógrafo Larry Birkhead.